"Los ojos ven, el corazón presiente."
Octavio Paz
Que pocas cosas duelen. Digamos, por ejemplo,
que se puede no amar de repente y no duele.
Duele el amor si pasa
hirviendo por las venas.
Duele la soledad,
latigazo de hielo.
El desamor no duele. Es visita esperada.
No duele el desencanto. Es tan sólo algo incómodo.
Somos así, mortales
sin duda acostumbrados
a que todo termine.
Irene Sánchez Carrón
De "Porque no somos dioses"
1998
1 comentario:
Muy bellos versos, cuanta verdad encierran ..
Un abrazo
Saludos fraternos
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